Lugares para sanar tu corazón

Hace poco leí una frase que decía: “¡El tiempo no cura un corazón roto, nos curamos nosotros a base de voluntad, no es poético pero es lo que hay!”. Y no hay nada más cierto, después de una decepción amorosa lo menos indicado es quedarnos encerradas en casa llorando y esperando a que la situación cambie por arte de magia (aunque llorar un par de días también ayudará a sanar), lo más recomendable es sacar valor, salir, hacer actividades y visitar lugares que nos ayuden a sanar y nos regalen momentos de diversión.  

Estas son algunas actividades que puedes hacer y destinos que puedes visitar si sufres de mal de amores.

Barriga llena, corazón contento

Aunque los días tristes para muchas es sinónimo de no comer, y para otras es sinónimo de comer mucho, lo cierto es que un viaje gastronómico te ayudará a sanar; y es que no hay mejor medicina para el desamor que un buen viaje y mucho mejor si el destino tiene tu comida favorita. Si eres amante de la pasta planear con tus amigas un viaje a Italia es un buen pretexto, si te gustan los tacos, sin duda, el lugar es México, o si te encanta la comida mediterránea puedes ir a Grecia, España o Turquía. Aunque es obvio que un viaje no se organiza de la noche a la mañana, elegir el destino, hacer los planes y preparativos te mantendrá la mente y el corazón ocupados y contentos. Cuando se llegue el día de abordar el vuelo, te sentirás mucho más feliz de cuando lo estabas planeando.

Un buen trago para pasar el momento amargo

Ahora, que si la comida no es lo que te mueve, pero si te gusta probar diferentes licores, puedes planear un viaje a una de las rutas del vino en Francia, o la ruta del Whisky en Escocia, o la ruta del mezcal en Oaxaca, México, recuerda lo que dicen por ahí: “Para todo mal un mezcal”. No olvides que te tomará tiempo planearlo pero puedes lograrlo.

Un viaje a tu infancia

Gracias a los psicólogos y terapeutas nos hemos dado cuenta de que varios de nuestros patrones de comportamiento, muchos relacionados con la vida en pareja como el miedo al compromiso o al rechazo, tienen que ver con nuestras vivencias de infancia. Se ha vuelto muy común escuchar el termino “sanar tu niña interior”, pues bien, asistir a un taller para sanar tus heridas de infancia te ayudará a tener una visión clara de lo que necesitas en tu vida. Hay muchas opciones en las redes, o puedes preguntarle a tu terapeuta o algún amigo, para que te recomienden asistir a un taller con personas profesionales y que realmente sepan del tema.  ¡Cuidado, hay muchos charlatanes por ahí!

Retiro de yoga

¡Mente y corazón sanos en cuerpo sano! Esta disciplina hindú, originada hace más de 5000 años, es toda una filosofía de vida. La combinación de asanas, respiración y meditación ayuda a equilibrar el cuerpo con la mente y el corazón. Obviamente es una práctica que puedes hacer diariamente en casa o en una clase, pero cuando se tiene el corazón roto, asistir a un taller de varios días te ayudará a sanar, mientras te ejercitas y fortaleces tu cuerpo, tu alma y tu espíritu. Te sentirás apoyada por los instructores, terapeutas o psicólogos que asisten, generalmente son talleres multidisciplinarios.

Días de spa

Nada más relajante, que te ayude a meditar y a tener pensamientos positivos que un buen masaje. Regálate un mes de masajes, puedes asistir a uno o dos por semana, será una buena terapia. ¡Los masajes ayudan a sentir bienestar y tranquilidad, saldrás como nueva!  

Ir a  la montaña

Caminar por la montaña te ayudará a tener claridad para poner orden a tus pensamientos, quizás puedas caminar por un río y tener una tarde divertida. Puedes alquilar una cabaña con tus amigas y pasar la noche allí, hacer una fogata y mirar las estrellas mientras te llenas de pensamientos positivos. Hagan un ritual para atraer cosas positivas, lleven juegos de mesa y hagan actividades que no te recuerden todo el tiempo que te duele el corazón. Distraerse y no enfocarse demasiado en el dolor es la clave.