Tips fáciles para beber más agua aunque no te guste

Aunque se dice fácil, beber agua puede ser una misión imposible si no disfrutas de su sabor. Y si tú eres de las personas que no se puede tomar ni medio vaso al día, aquí te compartimos unos consejos realmente prácticos que te harán ingerir más agua sin que te des cuenta. 

Seguramente has escuchado por todos lados la importancia de tomar entre dos y tres litros de agua al día; lo sabemos, ¡suena imposible! Pero ten en mente que parte de esta ingesta también puedes obtenerla de alimentos y otro tipo de bebidas….no, ¡las bebidas azucaradas no cuentan!

Pero bueno, entremos en materia y comencemos con esos tips:

De sorbo en sorbo

Es abrumador ver una botella gigante de dos litros y saber que debes terminarla; a mí me ha pasado, ¡y eso que me gusta el agua! Así que para hacerlo más ameno y factible, prefiero usar un vaso de 250 mililitros o una botellita reutilizable de 300 mililitros.

Estas cantidades pequeñas lo hace ver como una tarea más alcanzable y de sorbo en sorbo te acabarás la botella sin darte cuenta. Comienza con una al día por una semana, y automáticamente tu cuerpo te irá pidiendo más con el paso del tiempo.

Ponle sabor

Probablemente has escuchado este consejo por todos lados, y la verdad es que es muy efectivo. Agregar unos trozos de pepino y menta, limón o fresas le da un ligero sabor refrescante al agua natural. Así tal cual, fruta y nada más. Esto te hará olvidarte de que estás tomando agua simple y te ayuda a alejarte de bebidas azucaradas como las gaseosas o jugos comerciales ya que pueden destruir tu sistema inmune.

Consume alimentos ricos en agua

Sí, se dice que debemos consumir de dos a tres litros de agua diariamente, pero esto no significa que deban ser dos litros de agua pura tomados directamente del grifo.

Los requerimientos en el consumo de agua también puedes obtenerlos de los alimentos y otro tipo de bebidas. Alimentos como la sandía, lechuga, pepino o apio son una excelente fuente de agua. Inclúyelos en tu dieta e hidrata tu cuerpo sin mucho esfuerzo.

Además, bebidas como el té, jugos naturales, leche sin grasa e incluso el café en moderación también ayudan a alcanzar el mínimo recomendado de agua por día. Sólo recuerda mantenerte alejada de las bebidas con alto contenido de azúcar y bebidas deportivas si no las necesitas. 

A primera hora del día

Okay. Si el agua no es lo tuyo, quizá este paso sea algo complicado para ti, pero te aseguro que es un hábito muy bonito y le viene muy bien a tu cuerpo. 

Cuando vayas a dormir, lleva un vaso de agua contigo para que al despertar sea lo primero que ingiera tu cuerpo. Unos pequeños sorbos de agua a primera hora del día ayudan a despertar tu sistema y a ti te pone en healthy mode. Usa un vaso pequeño para que no te abrumes y verás que con tan sólo un par de sorbos es suficiente para comenzar el día con el pie derecho. ¡Ah! y recuerda que un buen hábito lleva a otro, y así sucesivamente.

Compra un filtro

¡Olvídate de comprar agua embotellada! Tener un filtro en casa siempre es una opción mucho más duradera que te permite hidratarte sin gastarte una fortuna.

Puedes optar por filtro en jarra, filtro en el grifo o una botella con filtro incluido. Todo según tus necesidades y gustos.

Ingerir suficiente agua es imprescindible para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo. Según informa el Centro para el Control de Enfermedades en Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), la deshidratación puede llevar a cambios en el estado de ánimo, malfuncionamiento de órganos, daño en articulaciones, entre otros malestares significativos.